Lo que hay detrás del amor.

Cuando se trata de amar tú no eliges, nunca va a ser el más adecuado, ni el más sensato, ni el más perfecto.

Cuando se trata de amar solo llega, se sitúa en tu vida, se apodera de tus pensamientos y emociones.

Cuando se trata de amar, hay calidez hasta en los silencios, hay ganas de hacerlo todo y no dejarlo para otro día.

Cuando se trata de amar, reescribo mi historia, el amor no se seca en los labios, releo conversaciones, me preocupo por él, lo cuido, me muerdo el labio cuando lo veo, dejo de ser una mujer con dudas, de pronto todo es claridad.

Me doy cuenta de que estoy perdida, pero que me encontré, tan fuerte y tan capaz como jamás me sentí.

Enmarco su sonrisa en mis recuerdos preferidos, junto con mis diferentes ideas de una vida juntos, tan acoplados como sus latidos con mis convicciones, como su sonrisa con mi felicidad.

Cuando se trata de amar se trata de elegir los recuerdos juntos, esa película que los unió, ese concierto que los enamoró, esa cerveza con la que se dijeron todo, es leer un libro juntos y descubrir la ciudad.

Cuando se trata de amar, también se trata de conocer hasta los secretos más oscuros, cada detalle, cada mirada cómplice.

Cuando se trata de amar, sus caricias no se comparan con las de nadie más, sus besos son los únicos que te quitan la sed, sus abrazos son los únicos con calor.
Porque su mente es increíble y su mirada es hermosa, porque le da sentido a los poemas y las canciones románticas.

Cuando se trata de amar no hay tiempos, ni espacios, ni edad, ni momento, ni nada.

Cuando se trata de amar solo existes tú.

Por: Jessica Correa